Seguramente has escuchado de este hermoso país pero aún no te has animado a visitarlo. Cuba tiene infinidad de razones para que se convierta en tu próximo destino; su gente, su cultura, sus playas y su mística son solo algunas razones que hacen de Cuba un destino incomparable.
Una maquina del tiempo
Cuba resiste por causas propias y ajenas a modificar su ambiente, no tienen nada de montaje turístico. Las fachadas de las viviendas y edificaciones en sus barrios históricos han sufrido muy pocos cambios a través de los años, especialmente en La Habana. Los coches, tiendas y demás aspectos en el entorno dan la impresión como si se hubiera detenido el tiempo ¡Puedes vivir la experiencia de ver como era la vida antes!. Y aunque, puede que todo tenga un aspecto gris, la propia gente de Cuba es la que se encarga de darle color a las calles y el ambiente; una alegría que se contagia.
Sus playas
Si tuvieras que representar a Cuba en una sola palabra, definitivamente sería “playa”. Sus finas arenas y aguas transparentes hacen que Cuba destaque por esa belleza inigualable. El encanto de sus 22 kilómetros de arena blanca y mar turquesa son difíciles de encontrar en otras partes de mundo.
Ciudades coloniales
La Villa de la Santísima Trinidad, es un doble viaje en el tiempo imperdible dentro de Cuba. Sus calles empedradas, sus fachadas, tejados, balcones característicos y sus museos, son muchas razones para llegar a conocerla; es tal vez una de las mejores joyas coloniales de toda América reconocida como Patrimonio de la Humanidad.
Clima de ensueño
Si pudiéramos visitar el cielo, seguramente también tendría el clima de Cuba. Si para realizar un viaje, te fijas en la época (para evitar el mal tiempo) Cuba es el destino perfecto pues la mayoría de sus días son aptos para la playa, el sol y nadar en el mar sin problemas. Lo peor que te podría ocurrir sería una tormenta pasajera que interrumpa pocos minutos de sol.
Su gente y su cultura
Definitivamente si visitas Cuba, tener una conversación con su gente es algo que no podría faltar. Acogedora y amable son las principales características que las definen, personas siempre abiertas a cualquier conversación y con expresiones culturales particulares que hacen de tu tiempo algo sumamente valioso.